¿Cómo tener un matrimonio a prueba de divorcio?

¿Has pensado que tu más grande error ha sido casarte con el hombre con el que estás? Te entiendo. Hace unos años también lo pensé.

¡Estaba muy equivocada! por eso te comparto 7 tips para tener un matrimonio a prueba de divorcio.

Un buen matrimonio no es un accidente, es el resultado de un proceso. Un trabajo diario y constante que no siempre va a ser divertido y que de hecho, requiere dirección de DIos y mucha disciplina para llevarse a cabo.

Pero, ¿cómo lograrlo? ¿Cómo tener un matrimonio a prueba de divorcio? Te voy a compartir 7 tips que te van a ayudar:

1. Dejar las idealizaciones y comparaciones fuera:

Hace un tiempo una joven me escribía que no se sentía plena en su matrimonio pues sus parejas anteriores la habían llevado a pasar noches apasionadas, momentos emocionantes y su pareja, no le producía nada de eso.

Creo que el peor castigo que podemos tener cuando tenemos relaciones sexuales o relaciones con otra persona que no es nuestro cónyuge, es la memoria. Esa vocecita que te recuerda día tras día lo que hubo en un pasado y que ahora “ya no tienes”. Afortunadamente, tenemos a Dios que nos permite hacer “borrón y cuenta nueva”. ¡Ve a ÉL! Y cuando tu mente quiera traer esas memorias, enfócate en construir intencionalmente un mejor presente y no dar tamaño al pasado que ya no está.

Esto no es automático, tampoco es fácil, pero es necesario que lo hagas para poder tener todos tus ojos en construir un mejor ahora con tu esposo. ¡Inténtalo! te sorprenderás.

2.Perdonando y pidiendo perdón constantemente:

Si en un matrimonio no hay perdón diario, el rencor y la amargura destrozarán a los cónyuges. No perdonamos porque el otro lo merezca, perdonamos porque nosotros mismos lo necesitamos. Y no pedimos perdón porque se vuelve una muletilla para decir “nada pasa, ya lo siento” sino porque vamos a tomar la determinación de cambiar de rumbo y tratar, un día a la vez, de dar lo mejor para nuestro esposo.

3.Dejando los problemas a Dios y no en el cónyuge:

Repite conmigo, los problemas no los puedo cargar yo, ni mi cónyuge. ¡Necesito entregarlos a Dios cada día¡ Desquitarnos con los que amamos porque no podemos con lo que vivimos es un error. Es necesario aprender a gobernarnos para que la vida de Dios sea la que toma el control en momentos de presión.

4.Conociendo cómo recibe el amor tu cónyuge:

Tu esposo no necesariamente recibe el amor como tu crees que se ama. Cada persona tiene diferentes maneras de sentirse especial y parte de tu labor en el matrimonio es conocer más a tu cónyuge y determinante hacer lo que le hace sentir especial y amado. ¿Cómo? Preguntando. Hoy, luego de comer y cuándo estén bien de ánimo preguntale a tu esposo ¿Cómo te puedo hacer sentir amado? ¿Qué puedo hacer por ti hoy? ¡Y hazlo! verás que será un ingrediente importante que los ayudará a crecer en su relación.

5.Trabajando en la intimidad constantemente:

Una buena sexualidad es el resultado de una intimidad intencional. En la medida en que la unión con tu esposo crezca, te darás cuenta que podrás llegar a niveles de placer y unión más hermosos con tu pareja. El éxito debajo de las sábanas se consigue cuando no estamos en ellas. Trabaja por tu hogar, determinate luchar por un mejor hoy comenzando desde ya.

6.Amando no juzgando:

Es triste ver como cuando nos casamos queremos que nos amen y comprendan, pero al mismo tiempo estamos castigando y juzgando al otro todo el tiempo. Decide amar, decide aceptar y abrazar al otro. No trates de cambiarlo, busca la manera de hacer que las diferencias que tienen los hagan más fuertes y sigan adelante.

Para terminar, el paso más importante:

7. Poniendo a Dios en el primer lugar:

Ponernos a nosotros mismos como primer lugar en la relación, es egoismo. Poner al otro es codependencia. El equilibrio se logra cuando Jesús toma el primer lugar, allí sabrás que tu hogar será edificado sobre la roca y no sobre las necesidades de ambos cónyuges. ¿Qué hacer? Comienza hoy a hablar con el Señor, acercate a su amor y el te dará la guia para que tu hogar esté cada vez más fuerte y se convierta en una casa a prueba de divorcios.

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Por cierto, si sientes que necesitas apoyo para lograr un hogar más fuerte, te dejo el link con la plataforma de ayuda que hemos creado para tí. ¡Te esperamos!